jueves, 29 de noviembre de 2012

EL CLUB DE LOS VIERNES, de Kate Jakobs

Literatura de mujeres, literatura para mujeres, literatura sobre mujeres... Son muchas las etiquetas que suelen acompañar a libros como esta pequeña novela sin pretensiones, que ha alcanzado la categoría de superventas. Puedo aceptar ese subtítulo de "Literatura sobre mujeres", sí; porque, al fin y al cabo, la historia es la de 8 mujeres, muy diferentes entre sí, que encuentran un espacio común para compartir y conocerse. Es habitual que los "sabios" de lo literario (algo que yo todavía no me he atrevido a definir), consideren que esta obra es un subproducto para masas, planificado y escrito con la finalidad de conmover y atraer a un público, comúnmente disciplinado, que es el femenino. Mujeres que quiere leer sobre sí mismas, que quieren encontrarse reflejadas en aquello que se escribe, que buscan la identificación con los personajes, y que se sirven de la literatura para evadirse. ¿Convertiría esto a "El club de los viernes" en una falacia literaria? No lo creo. Ni sería capaz de alzar esta obra a los altares de la cultura universal, ni mucho menos sería capaz de defenestrarla y mentir, negando que la historia entretiene, los personajes enganchan, y la sencillez de la trama facilita la lectura rápida. Sin más pretensiones, que no las tiene. En todo caso, si algún valor tiene esta novela es, desde luego, la vocación de convertir uno de esos actos que asociamos a la "mujer de estar en casa", a la comúnmente insultada como "maruja", en una actividad de peso y de valor para las vidas de sus protagonistas. La labor de punto, tejer, es para estas mujeres no solamente su sustento, en algunos casos, sino también su forma de entrar en sociedad, de descubrirse como personas y, al fin y al cabo, de conquistar un grupo de hermanas, de amigas, de cómplices y compañeras que niegan eso de que la verdadera amistad entre mujeres no existe. Conviene, de vez en cuando, acercarse a uno de estos pequeños hitos editoriales porque, y así lo defiendo, mujeres y hombres pueden encontrar en ellos algo sorprendente, algo poderoso, que es la posibilidad de conocer en mayor o menor profundidad la psicología femenina. La fortaleza de la mujer y su espíritu de lucha. Literatura sobre mujeres, escrita por una mujer. Me niego a pensar que su público serán solamente esas denostadas lectoras de andar por casa.

viernes, 9 de noviembre de 2012

"Cuentos por teléfono", de Gianni Rodari

Hace ya tiempo que tenía ganas de volver al blog. Pero los que me conocéis ya estáis al tanto del muchísimo tiempo de que disponía en los últimos años. Pero ahora, de nuevo, vuelvo ser persona. Nuevo trabajo más acorde conmigo, más tiempo, más ganas de leer. Y por eso, renuevo este espacio que antes reservaba para mis luchas "precarias" con ánimo de convertirlo en lugar para la lectura, los libros, las reseñas (mías y de otros), las recomendaciones literarias... Bienvenidos al nuevo "Pendientes de un hilo". Y comienzo con un guiño a mi infancia y la reseña de "Cuentos por teléfono", hecha por mi amiga Gilda. ¡¡Comenzamos!! _______________________________________________________ Cuentos por teléfono// Autor: Gianni Rodari// Editorial: Juventud// Año de publicación: 1981 (4ª edición) El Sr. Bianchi, de Varese, es un padre muy ocupado. Su profesión de viajante hace que no vea a su hija en toda la semana y, por ello, siempre busca un ratito para ella: a la hora de dormir, la llama por teléfono y le cuenta un cuento. Eso sí, un cuento cortito, que las llamadas salen muy caras. Con este principio tan sencillo, pero tan prometedor, comienza “Cuentos por teléfono”. A partir de aquí, el libro es una sucesión de cuentos muy cortitos (alguno de ellos no llega a una página completa). Lo que Gianni Rodari consigue con este libro es crear un mundo propio de fantasía. Se inventa idiomas (brif, bruf, braf), números (milenta tamanta catorce y treinta y tres), lugares (el país sin punta, el país con el “des” delante...). Pero todos estos elementos fantásticos los incorpora de una manera tan cotidiana y con tan pocos aspavientos, que te llegas a creer que este mundo, el de Gianni Rodari, existe, y que tú puedes participar de él. Recuerdo con gran cariño las ocasiones en las que leía este libro de pequeña, cómo me llegaba a imaginar que estaba con un martillo en el edificio que había que romper, o que me perdía en el camino que no iba a ninguna parte. Mi gran sorpresa ha sido que al releer el libro para poder hacer esta reseña me he sentido igual: me he trasladado a mi infancia junto a Alicia Caerina, Apolonia la de la mermelda y todos esos personajes que han hecho felices a tantos niños. Mi libro ya tiene muchos años. Es de Editorial Juventud, del año 81, y tiene unos dibujos preciosos de Jordi Saludes que te hacen meterte aún más en las historias. Sé que ahora se ha publicado otra edición en Círculo de Lectores, con unas nuevas ilustraciones: habrá que echarle un vistazo, ya que promete otras muchas horas de diversión para una nueva generación de niños. Es un lujo poder contar con libros infantiles como éste. Creo que su gran logro es contener en sus páginas un mundo maravilloso de imaginación, del que ha disfrutado (y se nota) Gianni Rodari al plasmarlo en papel y los niños a los que se dirige al leerlo. Y también deberíamos disfrutarlo los mayores que, más o menos escondidos, guardamos aún los retazos del niño que fuimos. GILDA